jueves, marzo 02, 2006

Operación Mínima



Sacarse la piel y escarbar. Siempre más profundo y sin parar. Obsesión presente es el develar. Rompemos las carnes musculares, abrimos la caja de huesos y aparecen incontables órganos extraños. Los extraemos, pero siempre hay más. Casi todos sin nombre. Inconfesables.